Mi historia

Creo que todos tenemos experiencias fuertes y duras, pero estoy segura que si las compartiéramos cambiaríamos muchas vidas. Por eso hoy quiero contarles una parte de mi historia, la que me marcó y me cambio por completo.
Voy a empezar a los 16 años, porque en ese año quedé embarazada de mi primer hijo Matías, por estar tan pequeña fue prematuro, fueron los 9 días más agonizantes que recuerdo, creció sano y muy feliz. A los 19 quedé embarazada por segunda vez, yo sufría de violencia doméstica con el Papá de mis hijos e infidelidad, nos separamos a los 3 meses de embarazo de la segunda bebé Camila, debido a que los golpes y  el maltrato sólo iba en aumento. Al cumplir Camila 2 meses de nacida, le diagnosticaron a Matías mi hijo el mayor Leucemia, yo con apenas 19 años, recién separada, con dos hijos y ahora uno con cáncer. Fue un proceso fuerte, empezamos quimioterapias, prácticamente verlo morir en una camilla. Creo que si sos mamá sabes lo duro que es ver a un hijo enfermo, pero saber que esa enfermedad lo puede matar, es algo que te rompe, te desgasta y te hace sentir impotente. Son 2 años y medio de quimioterapias, al año del tratamiento conseguí un trabajo por fin, Ya no teníamos que estar tanto en el hospital, dos meses después de ser una muy feliz trabajadora, de regreso a mi casa caminando, me asaltan tres hombres, los cuales abusan sexualmente de mi. Si, me violaron los tres. Ese día sólo podía pensar «¿Quién llevará a mi hijo a las quimioterapias?, Camila esta pequeña no se recordará de mi» realmente lo único que quería era salir con vida, porque ese día no podía morir, sin importar cuál fuera el daño que podía dejarme este evento, aún tenía muchos planes y dos personas muy importantes para seguir. Ya para este momento me había llovido sobre mojado, pero aún faltaba más. Siempre fui una mujer muy fuerte, pero también siempre oculte mis sentimientos reales, prefería fingir con esta hermosa sonrisa que me heredó mi mamá. De que me servía llorar porque me quedé sin esposo? O Llorar porque mi hijo tiene cáncer? O  tal vez llorar porque me habían violado?. Ninguno me pareció jamás buena idea. Me refugie en las drogas y en los amigos, me mantenían distraída de lo que realmente me pasaba y podía reír más. Mucho tiempo mi oración para Dios era «por favor permíteme morir hoy» deseando únicamente morir y dejar de sentir todo eso que no dejaba salir, yo estaba exactamente como una bomba a punto de explotar. Luego conozco a un hombre increíble que pensé que era el indicado, pero resultó que era aficionado a los golpes tanto que superó al papá de mis hijos. Enrollada en esta relación enfermiza, estuve con el 4 años de mi vida, que prácticamente fueron un calvario.
Ahora que lo pienso bien me atrevo a decir, que probablemente no me sentía merecedora de amor, de paz y de nada bueno, Ya que sin haber sido asesina o ladrona ya me habían acontecido cosas terribles, probablemente buscaba morir con mis decisiones.
Hasta que un día me vi al espejo y vi que no era yo, donde estaba esa mujer fuerte? Esa mujer risueña, esa mujer tan positiva, esa mujer tan soñadora. Realmente me deje perder en todo lo malo que me pasó, me deje arruinar y mi decisión había sido morir en vida. Ese día tuve mucho miedo, porque no sabía dónde estaba yo y como iba a encontrarme.
Desde pequeña sabía que iba a llegar muy lejos, siempre creí muchas cosas grandes y buenas de mi, realmente sabía que aún existía esa parte en mi, solo se había apagado.
Así que deje a ese hombre, y empecé a trabajar conmigo, fui mi psicóloga, fui mi consejera, fui mi amiga y muchas veces mi enemiga. Pero entendí que sólo yo podía decidir que iba pasar con mi vida, que nadie más me iba ayudar, que nadie podía cambiar nada por mi y que yo tenía que hacer algo para ser diferente.
Allí es donde empiezo a escribir, donde me doy cuenta que todo lo vivido fue por un gran aprendizaje, que sin duda todas estas situaciones me llevaron a quebrarme, me queme, y no quedó nada de mi. Sin embargo volví a formarme entre mis cenizas y logre hacer algo hermoso.
Ahora tengo 27 años, soy una mujer muy positiva y feliz, me encanta ayudar, amo escribir, bailar, cantar, hacer ejercicios, amo a mis hijos y me encanta poder disfrutar cada etapa, porque se que todo tiene un plan. Mi enfoque ahora es poder ayudar a las mujeres que han sido abusadas sexualmente, verbalmente, físicamente o psicológicamente, se que nací para ayudarlas en sus procesos, para guiarlas en ese camina, porque yo también fui una como tu.
Probablemente sino me hubiera pasado todo esto no me estarías leyendo y yo no tendría de que escribir.
Así que piensa, el sufrimiento es necesario para nuestra vida, nos enseña, nos ayuda a comprender, a poder aceptar, nos moldea, nos quiebra pero sin duda nos da la oportunidad de poder ser alguien nuevo, alguien mejor, nos da un rumbo y nos muestra para que estamos hechos. Sólo tu decides que hacer con los momentos malos en tu vida y en que convertirlos.
Toma la decisión y haz que valga la pena.

Si eres una de estas mujeres y quieres mi ayuda, puedes contactarme a:
Instagram @talvezsosvos
Correo narayanamoralesmendez@gmail.com

Me encantará poder hablar contigo y poder apoyarte en tu proceso. Escríbeme

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