Sentada en la luz

Desperté y me vi otra vez en el mismo lugar, me di cuenta que lo único que se había deteriorado era mi físico y mis sentimientos, mis ganas ya no eran las mismas que cuando empecé a vivir, había perdido las ganas de conocer lo nuevo, porque todo lo nuevo que había conocido había sido malo.
Sin darme cuenta rompí con cada parte, que me dejaron mis antiguos amores y con ellas las cenizas de mis fracasos, me sentía pérdida y sin ningún rumbo.
Di vueltas muchas veces, fue demasiado tiempo, porque mis piernas ya estaban cansadas pero no quería parar porque tenía miedo de dejar de caminar, Ya que eso me mantenía distraída y me ayudaba a no pensar tanto en mi.
Camine tanto que mis pies quedaron inservibles, mis tobillos rotos y por más que quisiera seguir, era momento de parar. Caí sentada, mis pies sangraban, mi mente no podía reaccionar de tanto dolor, mi corazón estaba partido y yo sabía que había sido la única responsable de lo que pasaba.
Me pude ver tirada y vi como empezó a brotar de mi cabeza tinta negra, que cubrió cada parte de mi, solo recuerdo que un frío inundó toda mi piel y deje de respirar.

Como puedo ayudarme?
No quiero morir!

Abriendo mis ojos comprendí que así estaba yo en mi cabeza, que por miedo a sentir, no quería parar de caminar para no descubrir que era lo que realmente me dolía, que sin querer termine devastada y fui la única culpable de sentirme así.

¿Cuántas veces al día ocupas tu mente para no pensar en lo que sientes realmente?

¿Cuándo vas a tener tiempo para ver dentro de ti y ver en que parte te Olvidaste de ti?

¿Cuántas veces más vas a ocultar lo que sientes con esa sonrisa quebrada?

¿Cuándo vas a decidir ayudar a tu inconsciente? Darle la mano y que se vea bien como tu físico.

Es tan increíble como podemos evitar nuestro verdadero yo por complacer a otras personas, como llegamos a olvidarnos de nosotros por tener de prioridad eso que no es tan importante.
Hoy sólo quiero que entiendas que si no sabes a quien tienes adentro o como lo tienes viviendo, nada te podrá hacer sentir completó, porque no es lo material, no es tu estado económico, no son tus títulos y mucho menos tu apariencia. Enfócate en lo que realmente importa y vale, que sos vos, esa voz que te habla todos los días y no Quieres escuchar, esos pensamientos que tienes retenidos y esos sentimientos que has tenido desviados por varios años.
Confróntate, analiza que te duele y acéptalo, entiende tus miedos, ama tus sentimientos, separa tus pensamientos y escoge los mejores para que se queden y empieza a limpiar todo eso que ahora te tiene manchado, porque donde estas sentado sólo hay luz y sos el único que tiene apagado el corazón.

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