UN HOMBRE REAL

Quiero a un hombre así

Lo quiero con hambre.
Hambre de vida, de verdad, de mí.
Que no tenga miedo de mirarme como si pudiera leerme entera.
Que no le tiemble la voz cuando dice lo que siente. Que no huya cuando algo se pone jodido.

Lo quiero decidido. Con heridas que no niega.
Con pasado, pero con ganas de futuro.
Valiente no por no tener miedo, sino por quedarse cuando tiembla todo.
Disciplinado, con propósito. Que se levante igual cuando no tiene ganas.
Con la mente despierta y los huevos puestos.

Lo quiero emocionalmente disponible.
Que no le dé asco su ternura.
Que me acaricie como si supiera que ese roce me salva del mundo.
Que sea directo, pero no bruto.
Que entienda que los detalles son sexo también.
Que escuche. Que entienda mis tiempos. Que no me quiera domar.

Quiero que sea amoroso, sí, pero con fuego.
Que no me dé un amor tibio, sino de esos que queman el pecho.
Que sepa llorar y hacerme reír. Que sea cursi, sin miedo al ridículo.
Que me cuide sin encerrarme. Que sepa estar solo, pero elija quedarse.

Físicamente, lo quiero presente.
Grande. Espalda de refugio. Manos que sujeten.
Barba que raspe. Dientes que rían.
Olor que me haga cerrar los ojos.
Que esté limpio, ordenado, que se quiera.
Que se vista con ganas, aunque no sea por moda. Que se vea, que se habite.

Y que me cargue. Que me levante. Que me baile aunque no sepa.
Que me cante aunque desafine.
Que me coja como si en ese instante se le fuera la vida.
Y que me abrace después como si en ese mismo cuerpo me encontrara a mí.

Quiero que el sexo no sea solo carne, sino alma.
Quiero que le guste jugar, explorar, entregarse. Que lo viva conmigo.
Y que le encante, con locura, con ganas, igual que a mí.

Pero sobre todo,
quiero que me vea.
Que me vea de verdad.
Y que al mirarme, sienta que ahí —justo ahí— podría quedarse.

Y mientras todo esto arde dentro mío, me doy cuenta:
No busco perfección.
Busco presencia.
No quiero a alguien que me complete.
Quiero a alguien que se sume a mi fuego sin miedo a quemarse.

Porque lo que pido no es poco.
Pero yo tampoco lo soy

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi Compañero de Aventuras

UBICACIÓN EXACTA

ADIÓS NARAYANA